Sup: 170m2.
Esta vivienda de vacaciones, realizada junto con el arq. Juan Jose Viacrio fue concebida con la premisa fundamental de ser sustentable, de rápida construcción y economía energética y de recursos, tanto la materialización como la ambientación interior del mismo debía ser coherente con dichos conceptos, pensado en materiales de muy buena calidad, de poco mantenimiento, durables en el tiempo y que evoquen el espíritu del lugar donde está enclavada.
La casa se implanta sobre una losa despegada del suelo para minimizar el impacto sobre el terreno natural.
Una pérgola metálica cubre toda la superficie de techo, brindando protección a través de las plantas nativas que la cubrirán en su totalidad. Esta cubierta “flotante” va transformándose morfológicamente y adaptándose a las diferentes necesidades de control de asoleamiento, de intimidad, protección o de ocultamiento.
Todo el conjunto, cuando la vegetación lo complete, brindará no solo protección adicional a la vivienda, sino que contribuirá al ahorro energético y al mismo tiempo mimetizará la aparición de la casa con el paisaje natural.
En un principio, la estructura se cubrió con telas tensadas que cumplirán las funciones requeridas de protección hasta que las plantas crezcan y terminen de conformar la idea planteada.